LEYES
¿Qué es un milagro?
Un milagro no puede
ser sino la manifestación de ciertas leyes ignoradas o muy raramente conocidas
por los hombres.
Un milagro, en este
mundo, es la manifestación de leyes de otro mundo.
Sobre la tierra,
estamos muy alejados de la voluntad del Absoluto; estamos separados de ella por
48 órdenes de leyes mecánicas.
Si pudiésemos
librarnos de la mitad de estas leyes, nos encontraríamos sujetos a solamente 24
órdenes de leyes, es decir, a las leyes del mundo planetario y estaríamos un
escalón más cerca del Absoluto y de su Voluntad.
Luego, si pudiésemos
librarnos de la mitad de estas leyes, nos encontraríamos sujetos a las leyes
del sol (doce leyes) y, por consiguiente, estaríamos aún un escalón más cerca
del Absoluto.
Y si pudiésemos, una
vez más, librarnos de la mitad de estas leyes, estaríamos entonces sujetos a
las leyes del mundo estelar y separados solamente por un escalón de la voluntad
inmediata del Absoluto.
Por lo tanto, para el
hombre existe la posibilidad de librarse gradualmente de las leyes mecánicas.
El estudio de las 48
órdenes de leyes a las que el hombre está sometido no puede ser abstracto como
lo es el estudio de la astronomía; no hay sino una manera de estudiarlas, esto
es el observarlas en uno mismo y el llegar
a librarse de ellas.
Al comienzo, un
hombre simplemente debe comprender que él no tiene ninguna necesidad de
permanecer esclavo de mil pequeñas leyes, fastidiosas, que otros hombres han
creado para él, o que él ha creado para sí mismo.
Pero tan pronto
intente librarse de ellas, verá que no puede.
Si hace largos y
persistentes esfuerzos en esta dirección, éstos no tardarán en convencerlo de
su esclavitud.
Estas leyes que
tienen al hombre bajo su dominio, sólo se pueden estudiar luchando contra
ellas, y esforzándose por librarse de ellas.
Pero se necesita un
gran conocimiento para llegar a librarse de una ley sin crear en sí mismo otra
en su lugar.
Los órdenes de leyes
y sus fuerzas varían de acuerdo con el punto de vista desde el cual
consideramos el rayó de la creación.
Ouspensky
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